Para que un vehículo funcione de la manera adecuada, el motor es la parte más importante. Se puede pensar en este como el verdadero corazón de un coche. Si este comienza a fallar, todo el coche lo hará y, a la vez, se pondrá en riesgo la seguridad de las personas. Por eso, a continuación, vamos a darte algunos consejos para cuidar el motor de tu coche.
Claves para cuidar el motor de tu coche
Para que el motor se mantenga en buen estado, es necesario no obviar ningún síntoma que este pueda estar mostrando. Pero, además, es necesario llevar al coche a todos sus controles para poder detectar con tiempo fallos que puedan llevar a daños mayores. Además de ello, algunas de las claves para mantener en buen estado y por más tiempo el motor de tu vehículo son las siguientes:
Controlar el aceite
El aceite es el alimento y la vida de un motor. Por eso, si lo que se quiere es cuidarlo, es muy importante no intentar ahorrar en el aceite y elegir siempre el que está recomendado por la marca particular de ese coche.
A su vez, cada fabricante recomienda cuándo es mejor hacer el cambio de aceite. En general, esto se debe hacer cada 5.000 kilómetros, sin embargo, es importante que esto se haga siguiendo las fechas y las instrucciones del fabricante. El cambio a tiempo del aceite del motor es lo que va a hacer la diferencia entre que este dure más tiempo en buen estado, ya que es lo que mantendrá todas sus piezas bien lubricadas.
Calentar el motor
Especialmente cuando se tiene poco tiempo, es común que se pretenda usar el coche apenas encendido. No obstante, si se trata de un vehículo con carburador, este va a necesitar un calentamiento previo, ya que es lo que va a favorecer un mejor flujo del combustible. De lo que se trata es de esperar unos segundos para poner en marcha el coche luego de haberlo arrancado.
Si lo que quieres es cuidar el motor de tu coche, es importante tener en cuenta que, si lo acostumbras a arrancar en frío, tanto el motor como el arranque se van a ver sometidos a un trabajo forzoso. Con el tiempo, esto puede llevar a que se vea reducida la vida útil del coche.
Proteger el circuito de refrigeración
El circuito de refrigeración es un elemento muy importante en un vehículo. Esto se debe a que es una de las partes que más expuesta se ve al paso del tiempo. Teniendo esto en cuenta, lo que se recomienda es revisar el nivel del líquido refrigerante del coche y también controlar que no presente tipo alguno de fuga. Lo que esto va a permitir es evitar que el coche se caliente. Además, se evitan daños que pueden llegar a ser irreparables.
Otro aspecto que se debe tener en cuenta es que la marca del refrigerante debe ser siempre la misma. Además, se puede consultar cuál es la recomendada para cada coche en particular de acuerdo con su fabricante.
Cambiar la correa de distribución
La correa de distribución es muy importante para el buen funcionamiento del motor de un vehículo. Por eso, si quieres cuidar el motor de tu coche, es muy importante cambiar la correa de distribución con la regularidad recomendada por el fabricante. Es importante tener en cuenta que, si la correa se desgasta antes de tiempo, esto representará una de las averías más costosas a enfrentar.
Vigilar los sistemas de encendido
Tanto las bujías de encendido como sus respectivos cables tienen una vida útil que es limitada. Esto es lo que hace que sea necesario revisarlas cada un determinado tiempo, preferentemente el recomendado por el fabricante. Hay que tener en cuenta que, cuando una bujía de esta índole está deteriorada, puede provocar interrupciones en el encendido u otros problemas como las vibraciones o los fallos totales en los cilindros en los que las bujías están montadas.
Mantener filtros e inyectores
Hacer un buen mantenimiento en las distintas piezas que conforman un motor es lo que te va a permitir cuidar el motor de tu coche. Esto incluye los filtros de aire, las bujías y los inyectores. Hay que tener en cuenta que los filtros de aire son los que permiten que el motor respire. Además, los inyectores y las bujías son piezas clave que afectan a la potencia del vehículo y al desarrollo del coche, siendo, además, de las piezas que más se pueden desgastar con el paso del tiempo. Por eso, es muy importante estar siempre atento a si tiene daños para poder hacer reparaciones y cambios.
Controlar las goteras
A veces, podemos ver que el coche tiene goteras y pensar que es algo a lo que no es necesario dar importancia. Pero lo que hay que saber es que el radiador que transporta anticongelante hacia el motor cuenta con una manguera que está expuesta a altas temperaturas y que se puede ir dañando con el tiempo, llevando a fugas. Si estas fugas o goteras se dan, esto puede ocasionar que el coche se recaliente y empiece a fallar. Por eso, si se observan manchas en el suelo, es muy importante acudir al técnico.
Repostar el combustible
Finalmente, es frecuente que, especialmente cuando hay poco tiempo, se decida seguir circulando en el coche pese a que este muestre que no tiene combustible suficiente. Esto es algo que sucede recurrentemente, pero que representa un gran riesgo para el vehículo.
La principal razón de este riesgo tiene que ver con que en el fondo del depósito de combustible pueden reposar impurezas que se van acumulando en la medida que pasa el tiempo. Si esto pasa, la bomba puede terminar absorbiendo todas esas impurezas y acabar obstruyendo el paso de combustible. Esto, si sucede, puede generar daños en los inyectores.
