Para las personas apasionadas de la historia de los automóviles, España ha dado lugar a grandes clásicos. Los coches clásicos españoles representan grandes joyas del sector automovilístico. Son vehículos que han ido acompañando el desarrollo de la sociedad y que, en muchos casos, pueden verse todavía por las calles o en excelente estado en exposiciones. Vamos a hablar acerca de algunos de los grandes clásicos fabricados en España.
7 coches clásicos de España
Austin Victoria
Cuando se habla de coches clásicos españoles, no se puede dejar de nombrar al Austin Victoria. Era un coche concebido especialmente para los sectores más altos de la sociedad. Se trata de un vehículo del segmento C de cuatro puertas con motor delantero transversal de 4 cilindros en línea. Poseía 62 CV de potencia y tracción delantera. El coche fue producido en Pamplona por la empresa española AUTHI, filial de British Leyland Motor Corporation, entre los años 1972 y 1975.
Dos fueron las versiones que se vendieron de este coche. Por un lado, el Austin Victoria con 2 faros ovalados. Por otro, el Victoria de Luxe, con 4 faros redondos halógenos y suspensión hydrolastic, motorización de 1.275 cc y caja con 4 velocidades.
Citroën C15
El nombre del Citroën C15 provenía de los 1.500 kg de masa máxima con los que fue homologado el modelo. Su principal slogan era “Se lo carga todo”. Es un coche que era presentado especialmente como cómodo y fiable. Presentaba un diseño moderno y robusto con un motor incombustible de hasta 140 km/h.
El coche tuvo 3 actualizaciones a lo largo de su historia. Estas se basaron siempre en 2 motores de gasolina y 1 de diésel. La última unidad del Citroën C15 fue fabricada en el mes de diciembre de 2005 en España, en la planta ubicada en Vigo.
Peugeot 505
Uno de los grandes clásicos españoles es el Peugeot 505. Es un coche clásico que se mantuvo en el mercado entre 1979 y 1990 y se convirtió, entonces, en uno de los modelos más importantes y reconocidos de Peugeot. Era una berlina del segmento D que venía a reemplazar al reconocido Peugeot 504 y acabó por superarlo. Su carrocería fue perfilada por Pininfarina y los interiores por Paul Braq. Estos nombres, tan reconocidos y destacados en la historia de la industria del automóvil, representaron gran parte del éxito del modelo.
El coche fue considerado como uno de los más fiables del momento. Se fabricaron dos bloques entre los diéseles, el primero con 70 CV sin turbo y el segundo con 80 CV con turbo. En lo que respecta a las versiones a gasolina, hubo 4 opciones: el de 1.8 litros, el de 2.0 litros con inyección mecánica y, luego, los de 2.0 litros y 2.2 litros.
Seat 124
A la hora de hablar de grandes clásicos entre los coches españoles, no es posible dejar de mencionar el Seat 124. Este fue presentado en el año 1968 en el Salón de Barcelona, pensado especialmente como un vehículo de excelencia para la clase media. La historia de este vehículo parte del Fiat 124, que había sido presentado por la marca en 1966. Hacia 1968, Seat logra un acuerdo con Fiat para la fabricación del 124 en España con el nombre de Seat 124. Hoy en día, es considerado como uno de los grandes vehículos clásicos españoles.
La producción de este coche se llevó a cabo en las plantas de la Zona Franca de Barcelona y en la de Landaben en Navarra. Un total de más de 640.000 unidades se fabricaron de este modelo. Se trataba de un coche del segmento C con un buen espacio interior y homologado para 5 pasajeros. También era destacable su amplio maletero, llegando este a 385 litros. Era un equipamiento completo para la época con su peso reducido y un motor de 60 CV de potencia. Fue elegido el coche del año en España el año de su lanzamiento.
Simca 1000
El Simca 1000 es un coche que empezó a desarrollarse hacia fines de los años 50. Para ello, se partía de algunas soluciones implementadas anteriormente en el Fiat 600. La demora en la producción de este vehículo fue lo que hizo que aparezca ya con una cierta antigüedad para la época de su surgimiento. Con los años, se fueron haciendo diversos cambios en el diseño. Los más importantes fueron vistos especialmente en la forma de los faros delanteros y traseros y también en el tamaño general del coche. Un aspecto innovador para la época tuvo que ver que el Simca 1000 permitía reclinar asientos para ganar espacio.
Renault 8
Lanzado al mercado en el año 1962, el Renault 8 continuaba algunas de las características que ya eran conocidas de la marca, como es el caso de las 4 puertas, el motor trasero, las plazas de 4 a 5, entre otras cosas. Construido por FASA en Valladolid, fue considerado como uno de los grandes clásicos españoles. La presentación de este coche lo posicionaba como un vehículo de mucho estilo.
Ford Fiesta
Finalmente, en el año 1976 aparece en el mercado la primera generación de uno de los grandes coches clásicos españoles, como es el caso del Ford Fiesta. Era el primer vehículo de tracción delantera de la firma y montaba un motor de gasolina con 40 CV de potencia en la versión normal y 45 en el caso de la versión de lujo. También había una gama alta con un motor de 1.1 litros y 53 CV de potencia. Uno de los aspectos más destacados de este coche tuvo que ver con que se encontraba entre los más ligeros de su clase en ese momento, con un peso de solamente 700 kg.
Pero, además, el primer modelo del Ford Fiesta presentaba otras novedades, como es el caso de su excelente resistencia al coche, mejorada con programas de simulación por ordenador. Además, lograba bajos niveles de consumo a velocidad constante y en conducción urbana. El objetivo detrás del surgimiento del Ford Fiesta tuvo que ver con competir con los utilitarios que se comercializaban en el momento. En la actualidad, el modelo se comercializa en su séptima generación.
